Originalmente concebidas para el servicio del azúcar en tazas de té o café, estas delicadas pinzas de plata reflejan la elegancia y funcionalidad característica de la casa Christofle. Su diseño refinado no solo las convierte en un clásico del arte de la mesa, sino también en una pieza versátil que puede adaptarse a otros usos con igual gracia.
Más allá de su función tradicional, estas pinzas pueden utilizarse para servir pequeños dulces, frutas, bombones, cubos de mantequilla o incluso delicados encurtidos, aportando siempre un gesto de sofisticación en la presentación.
Una herramienta sutil y encantadora, ideal para quienes disfrutan de cuidar cada detalle al recibir. Tamaño: 9.5 cms de largo